Aquí una hermosa sonrisa de mi bebé.
Siguiendo con las pato aventuras laborales, les comento que tengo un nuevo y lindo jefe, al cual le hago proposiciones indecorosas y el cual se pierde de locura por mis nuevas curvas (muy curvas por cierto), es comprensivo, atento, educado, gentil, aun que no dejo de tener un horario aterrador de trabajo de 8:00 am a 8:00 pm (y luego dicen que los mexicanos somos flojos) y de la cómoda y linda oficina nos movieron a obra y eso de subir con una panzona 9 niveles de escalera, hacer en unos baños insalubres y comer en puestos callejeros me agotan terriblemente, los nuevos compañeros son unos chicos recién saliditos de la universidad (todavía les envía su mami la comida), aun que los movimientos en la empresa siguen y el lunes posiblemente haya nuevos cambios así que no me queda más que rezar para que no me cambien de jefe, aun que si de oficina.
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